dijous, 17 de juliol del 2008

REFLEXIONES

Desde que Mª Carmen nos dejó, muchas personas se han acercado preguntando “¿qué puedo hacer por vosotros?” o “realmente no sé qué decir”. Espero que estas reflexiones os ayuden a comprender mejor nuestro duelo.

La muerte de Mª Carmen ha cambiado para siempre nuestras vidas. El dolor de su ausencia estará con nosotros cada día de nuestra existencia. Si lloramos cuando nos preguntáis ¿cómo te sientes?, no lo interpretéis como que nos hieren preguntando o hablándonos de nuestra hija. Nosotros necesitamos oír hablar de ella. Oír que fue importante para vosotros también. Por favor, no quitéis sus fotos o cualquier recuerdo que conservéis de ella.

Estamos haciendo todo lo que podemos para aceptar la muerte de Mª Carmen y darle sentido a nuestras vidas. Sin embargo, quisiéramos que entendierais que nunca lograremos recuperarnos por completo. Mª Carmen siempre nos hará falta y el dolor de su ausencia quizás con el tiempo pueda mitigarse un poco, pero nunca desaparecerá. Nos acompaña permanentemente. No esperéis que superemos nuestro duelo en seis meses o un año. Si algunas veces estamos retraidos, irritables o agresivos, es porque la tristeza que sentimos nos agobia y no sentimos ningún deseo de hacer contacto con nadie. ¡Imaginaros cómo se sentiría haber perdido la piel y quedar en carne viva! Cualquier roce, por insignificante que sea, produce un dolor intenso, del cual necesitamos protegernos. Esto algunas veces implica alejarnos de nuestra familia y amigos o de situaciones que recrudecen nuestro dolor. Algunas veces necesitamos estar solos porque el mundo parece girar a una velocidad vertiginosa para nosotros. Simplemente no tenemos los recursos para acoplarnos a ella.

Deseamos que entendáis que el dolor transforma a la gente. Cuando Mª Carmen murió una parte muy grande nuestra murió también con ella. "Soy la misma pero no soy lo mismo" . Nunca volveré a serlo. Deseo mucho que podáis comprender nuestro dolor, la inmensidad de nuestra pérdida, nuestro silencio y nuestras lágrimas … Al mismo tiempo espero que nunca lo comprendáis.

Esto forma parte de un libro escrito por Gisela Castillo de Luján "Buscando a mi estrella Mailí" Reconstruyendo mi vida después de la muerte de mi hija, es realmente lo que siento y cómo me siento.

Gracias a todos por vuestro apoyo.

LG